Mucho se ha hablado sobre si mantener relaciones sexuales es bueno o malo para tener mayores prestaciones deportivas. Las opiniones que podemos escuchar son muy diversas, pero lo normal es que se dividan en los que piensan que hacerlo en los momentos previos al partido o competición relaja y desestresa, y los que piensan que es contraproducente porque descentra, elimina el correcto tono muscular y adormece. Estas apreciaciones personales cargadas de una gran subjetividad, nada tienen que ver con lo estrictamente científico, ya que no hay ningún fundamento fisiológico que nos haga pensar que practicar sexo influya en el rendimiento deportivo. Pero en cambio, sí podemos decir que lo que influye en el deportista es la estabilidad emocional con la pareja, pudiéndose comprobar como aquellos con una relación inestable con su pareja rinden menos en situaciones importantes que aquellos que tienen una relación estable o no tienen pareja. Con esto hay que dejar claro que no se trata de un aspecto fundamental a tener en cuenta por los deportistas que compitan, ya que lo realmente importante serán otros muchos aspectos como una correcta planificación de los entrenamientos, una alimentación equilibrada, un correcto descanso,…, y dejar las relaciones sexuales como algo natural que no se programa.
Si bien, el deportista no se ve beneficiado de tener sexo antes de la práctica deportiva, se ha podido constatar que las personas que hacen deporte de manera regular mejoran la calidad de sus relaciones sexuales al producirse un incremento considerable de diversas hormonas sexuales tanto en el hombre como en la mujer.
Otro tema que suscita interés es el de si el acto sexual se puede considerar como una actividad física similar al deporte, y aunque efectivamente se trata de una actividad física en la que también se segregan endorfinas (hormonas de la felicidad), no se puede comparar con la práctica deportiva, ya que apenas se consumen calorías. Hay actividades que gastan más calorías como por ejemplo hacer la cama.
Por tanto, concluimos diciendo que, por lo general:
- Hacer el amor no es algo significativo en el tema del rendimiento deportivo, mientras que la estabilidad emocional con la pareja será algo clave.
- Las personas deportistas tienen relaciones sexuales de mayor calidad.
- Hacer el amor no puede compararse con una actividad deportiva, ya que apenas se consumen calorías.