9 Claves para dormir mejor:

Cada noche morimos; cada mañana nacemos de nuevo. Cada día una nueva vida. (Edward Young)

  1. Para descansar hay que cansarse previamente, ya lo dice la misma palabra “des-cansar” y si has tenido un día sedentario puede que te cueste conciliar el sueño, así que hay que moverse a lo largo de día, y eso no implica ejercicios extenuantes, sino que con incluir pequeños desplazamientos al trabajo, a la compra y a los diferentes recados andando o en bicicleta ya habrás conseguido gran parte de la cantidad de ejercicio mínima para tener mejor salud y poder dormir mejor.
  2. Darse palizas deportivas parece que tampoco es una buena solución, pues activa demasiado el sistema nervioso simpático que es antagónico a la relajación y reparación corporal, con lo que notarás que descansas peor; seguro que has experimentado esa sensación de estar tan cansado físicamente que no puedes dormirte.

  3. Abusar de estímulos visuales antes de ir a la cama y utilizar pantallas como la del móvil u ordenador hará que no desconectes bien tu cerebro, por eso debes sustituir la pantalla de los dispositivos electrónicos por un buen libro, que sin duda hará que te relajes, te duermas antes y el sueño sea de más calidad; si no te queda otra que utilizar una pantalla electrónica, ponte unas gafas con lentes amarillas que filtren la luz azul que es la que más incide en mantenerte despierto.
  4. Si dormir con frío no es agradable, demasiado calor interferirá en el sueño y por eso la temperatura de nuestra casa por la noche deberá ser 2-3 grados inferior a la de por el día, y siempre es mejor estar más abrigado en la cama y tener menor temperatura ambiente para dormir mejor.
  5. Deja la puerta abierta de tu habitación para que corra el aire; cuando dormimos seguimos respirando, gastando oxígeno y produciendo CO2 que se va acumulando en la habitación y si no hay una buena ventilación puede ser contraproducente; como curiosidad decir que a nivel del mar se suele dormir mejor porque hay más oxígeno.
  6. Libera tu cabeza de todo tipo de preocupaciones y para ello deja de pensar que tienes que hacer al día siguiente, y trata de apuntar en un papel antes de acostarte aquellas tareas a realizar, de esta manera descansarás sin tener que hacer un esfuerzo mental para recordarlas, y sabrás que las tienes en una lista que podrás consultar cuando te levantes.
  7. No vayas a la cama sin cenar pues habrá una menor secreción de serotonina y melatonina, hormonas que inducen el sueño, así que haz una cena equilibrada, con verduras, hidratos complejos y proteínas de fácil asimilación, evitando un consumo excesivo de grasas; no quedes empachado ni tampoco te quedes con hambre, y lo que tienes que respetar siempre es cenar lo más temprano que puedas y no demorar esta última comida del día, ya que el cuerpo no está preparado para comer en horas nocturnas, y entre los inconvenientes para el organismo, está el de un peor sueño nocturno.

  8. Si tienes oportunidad después de cenar trata de dar un pequeño paseo relajante para tirar la basura, sacar al perro o dar una vuelta a la manzana, y así sumarás algo más de actividad física a tu día sin que interfiera en el sueño, y servirá para llegar a la cama más relajado liberándote de las tensiones acumuladas durante el día.
  9. Recuerda que la cama no es un lugar para ver la televisión ni para cenar, ni para nada que no sea dormir y hacer el amor, siendo esto último algo mucho más idóneo para conciliar el sueño que hacer un maratón delante de la televisión viendo tu serie preferida.